Confesiones de mi diario de ruta I

En mis cortos noventa y siete años de edad, tuve la gran oportunidad de conocer muchos lugares del mundo, por no tener que nombrarlos todos*, y gracias a las muchas conferencias pude reafirmar la existencia de una euforiosa banda de seguidores, o como muchos destructores del habla hispana dirían: FANS. Tuve el agradable placer de sentir a la audiencia gritar mi nombre y de sacarme varias fotos con ellos, yo nunca supe que la publicación de un libro tendría tanta repercusión y causaría tal impacto entre los jóvenes, todavía en la calle los jóvenes me paran y me dan unas palmadas en la espalda en señal de agradecimiento. Yo como una mujer entrada en años debo admitir que no encuentro una explicación a la fascinación de los jóvenes por las malas palabras, porque expresan malos sentimientos cuando yo en realidad me percato de que quieren expresar lo contrario, por ejemplo, en una de mis tantas conferencias de prensa, se me acerca un joven entusiasta y me dice: ¡¡no sabes como me haces cagar de odio viejita!! y me guiñó un ojo; su mal uso del idioma junto con ese elemento bizarro y absurdo me sumergió en la confusión, realmente me odiaba, o simplemente era una expresión nueva?En fin. Finalmente aprendí a interpretar a los jóvenes... Sin mas que decir les diré adiós.

Be yourself. Mirta Botta

*para saber dónde, consultar mi libro en el apéndice B.
elquintobe@gmail.com